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jueves, 11 de noviembre de 2010

El cielo con las manos (3º parte)


Manu debutó con la selección argentina de baloncesto en el mundial de 1998 celebrado en Atenas. Su mejor actuación con la albiceleste llegó en el torneo de los juegos olimpicos de esa misma ciudad pero en 2004, uniéndose a otras grandes como el equipo de Estados Unidos en el olimpo del baloncesto mundial. Para el recuerdo quedará su canasta sobre la bocina que les dió el triunfo ante Serbia. En el mismo torneo, pero ya en los juegos de 2008 en Pequín, los sudamericanos derrotaron a Lituania sin Manudo, que se ausentó del mundial de este año por motivos familiares.


Manudona es un escolta zurdo, que desde que llegó a los Spurs siempre ha actuado como sexto hombre. Entró en la NBA a los 25 años en una época donde era muy común entrar siendo adolescente que todavia va al instituto. Junto a Parker, Ginóbili ha sido fundamental en estas últimas temporadas para la franquicia del sur de Texas. Su modus operandi consiste en ser muy agresivo de cara al rival, y decisivo a la hora de penetrar al aro rival. Al defender, Manu se caracteriza por hacer un contacto muy pegajoso con el contrario, lo que a menudo termina en falta (el argentino suele cargarse muy pronto de personales).

ESPN lo calificó como uno de los jugadores más teatreros de la liga.


El narigón, que además fue oro en el torneo de las Américas de 2001 (Neuquén) y plata en 2003 (San Juan), es el mejor ejemplo de como el técnico estilo FIBA puede triunfar en la NBA. Es el segundo latino que participa en un partido de las estrellas de la mejor liga del mundo tras el panameño Rolando Blackman. En el 50 aniversario de la Euroliga fue incluido en el cuadro de honor histórico junto a leyendas de la talla de Nikos Galis ó Saras Jasikevicius. En 2001, paralelamente a su mvp en la final four, en la Suproliga le dieron este galardon a Ariel McDonald. De aquella mítica Virtus Kinder de Bolonia, Manudona compartió equipo con Abbio, Frosini, David Andersen, Rigaudeau, Rashard Griffith, Matjaz Smodis y Marko Jaric, todos ellos entrenados por Messina. En San Antonio Spurs ha gando anillos con Brent Barry.


En mi más modesta opinión, he decidido situar a Manu Ginóbili como el sexto mejor internacional de fuera de EE.UU en la historia de la NBA.


Para terminar, una frase de su entrenador en San Antonio, Gregg Popovich que define a la perfección lo que representa Manudo en la franquicia:


" Tiene una enorme voluntad para hacer lo que un jugador necesita para ganar al máximo nivel de intensidad posible cada minuto que está sobre la cancha."


(Playoffs NBA 2005)

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