Los Sydney Kings son un equipo profesional de baloncesto que actualmente compiten en la NBL de Oceania (Australia, Nueva Zelanda, Nueva Guinea y otras islas del Pacifico). Estos kings juegan sus partidos como locales en el Sydney Entertainment Centre en Haymarket (Nueva Gales del Sur), en el centro de la ciudad. Los Kings son uno de los dominadores recientes del baloncesto australiano.
Los Kings nacieron de la fusión entre los West Sydney Westars y los Sydney Supersonics. A finales de los 80, el nuevo club llegó a semifinales, ganando la serie por 2-1 a los Melbourne Tigers. En la final, los Kings fueron humillados por los Canberra Cannons. A principios de los 90, el equipo contaba entre sus filas con Dwayne McClain, un americano formado en Villanova y que figuró en el quinteto ideal de la NBL australiana, así como lider en rebotes. Pero aun así, el equipo cayó en las finales frente al South East Melbourne Magic.
En pocos años, el conjunto de Sydney recibiría el apodo de Violet Crumble, en homenaje a una barrita de chocolate muy popular en el país, debido al parecido de los uniformes del equipo con el del envoltorio del dulce. A principios de este siglo, los Kings caerían eliminados ante los Townsville Crocodiles, pese a que contaban en sus filas con dos olimpicos como eran el base Shane Heal y Andrew Gaze.
Dos años más tarde, se unieron al equipo Chris Williams y Kavossy Franklin, más el entrenador lider en victorias en la NBL en toda su historia, Brian Goorjian. Con estos tres hombres en el equipo, los Kings acabaron en lo mas alto de la tabla y se llevaron el triunfo en la final ante los Perth Wildcats, el primero en su historia. Tras este triunfo, llegó a Sydney Jason Smith, quien volvía a casa tras militar en Scavolini Pesaro. Tras la retirada del ya anciano Heal, llegó C.J Bruton para cubrir su puesto, pero Smith se lesionó y entonces tuvieron que firmar a Chris Carrawell, que guió a los Kings hasta la final frente a sus rivales del Sydney Spirit. La estrella de los Kings, Matthew Nielsen, se llevó el mvp.
En la siguiente temporada, los Kings tuvieron una desgraciada noticia: Luke Kendall, su mejor novato, se rompió el ligamento cruzado anterior. Su sustituto fue Mark Sanford, americano. Finalmente, los Kings llegaron a la final y tras vencer en tres partidos a los Wollongong Hawks, se convirtieron en los únicos campeones australianos durante tres años seguidos. Al año siguiente, y tras negar los rumores sobre el hipotetico fichaje de Vince Carter, los Kings cayeron en la final frente a los Tigers de Chris Anstey.
Recientemente, el club fue adquirido por la empresa Firepower International, y por otra parte, Goorjian dejó el puesto para marcharse a los South Dragons. De entre sus estrellas actuales hay que destacar al base Damien Ryan ( ex jugador de varios clubes italianos como Avellino, Teramo, Triboldi ó Fileni Jesi).
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